Lidl está creciendo de forma imparable en el mercado de la alimentación. En España sin ir más lejos ha conseguido posicionarse entre las principales cadenas, gracias entre otras cosas a sus productos frescos, frutas y verduras sobre todo.
La compañía de origen alemán ha identificado en la huerta española la relación óptima de calidad y precio que estaba buscando y no solo se nutre de ella para llenar sus tiendas en el país, sino que también ha incentivado los últimos años su exportación a tiendas que tiene abiertas en toda Europa.
Confianza en la huerta española
Lejos de ser una tendencia temporal o solo una inversión esporádica, Lidl ha mantenido una inversión constante en la huerta de campos españoles. En el último ejercicio el incremento en la confianza de estos productos ha sido del 35%, ya que ha adquirido hasta 19 millones de toneladas.
En cifras económicas, esta cantidad representa 1.940 millones de euros, poniendo a Lidl en la cabeza de compra de productos de huerta españoles. Esto no es nuevo, ya era líder en compras de frutas y verduras cultivadas y cosechadas en España en el año 2015, solo que ahora ha consolidado esta posición con un crecimiento continuado en la inversión.
Repercusión en empresas españolas
El hecho de que Lidl confíe en productos como frutas y verduras originales de España no solo es óptimo para esos elementos en concreto, sino sobre todo para las empresas, responsables proveedores del producto a las tiendas de la marca de supermercados.
Lidl cuenta para sus tiendas en España con 2.315 proveedores, pero menos de la mitad son españoles, 1.027. Eso sí, cuando Lidl confía en una de estas empresas y la capacidad de producción se pone a la altura de las exigencias de la empresa internacional, el progreso de la compañía en prácticamente todos los casos ha sido muy favorable.
No solo se vende más producto, sino que la exportación del mismo a otras empresas extranjeras también se incentiva. Por descontado, esto también se refleja en el número de empleados, suponiendo Lidl uno de los principales impulsores de la contratación indirecta de trabajadores en España.
La compañía mantiene su crecimiento propio. En el último ejercicio fiscal facturó en España 3.594 millones de euros. Su cuota de mercado está rozando el 5% y también es la quinta compañía en el sector de la alimentación más importante en España, eso sí con un ritmo de crecimiento muy superior al de sus rivales.