Tal y como los inversores ya preveían desde el año pasado, la tendencia a la baja en el crecimiento de ingresos de Apple se ha consolidado. El culpable, el dispositivo móvil iPhone que parece estar mostrando el agotamiento vaticinado por analistas y la competencia.
Unos ingresos un 12% menores que el año pasado
La cifra del beneficio correspondiente al tercer trimestre del año se fija en 10.040 millones de dólares. Si bien para cualquier empresa podría suponer un éxito incuestionable, para Apple es sinónimo de decepción.
En comparación al año pasado, supone un descenso del 12% de los ingresos, un porcentaje bastante alto como para analizar a medio plazo cuál va a ser la reacción de la empresa estadounidense.
Es más, la facturación de esta división fue de 25.990 millones de dólares y el iPhone apenas representa el 50% de la cifra de negocio en general. Esto implica que cada vez el dispositivo móvil es menos importante para las cuentas globales de la compañía.
De hecho, confirma también el estancamiento que la tecnológica sufre hasta el momento. En la actualidad los ingresos totales de la compañía ascienden a 53.810 millones, apenas un 1% de crecimiento.
El sector servicios como próxima expectativa de negocio
Desde hace unos 3 años, Apple lleva invirtiendo en la división de servicios, precisamente para evitar que una situación como esta se prolongue durante demasiado tiempo.
De hecho, el porcentaje de cuota de negocio cada vez es mayor. Consiguió generar hasta 11.455 millones de dólares, un 12% superior a lo obtenido el mismo periodo del año anterior.
Otras opciones de la empresa recaen en la ya anunciada tarjeta de crédito o en dispositivos tecnológicos alternativos a los clásicos iPhone y Mac.
Situación bursátil de Apple
Todo ello recae en consecuencias directas sobre la valoración bursátil de la compañía, es decir, el valor de sus acciones.
En principio 2019 da alegrías a la empresa. Sus acciones han subido durante estos meses un 30%. Sin embargo, se mantienen valores alejados del máximo obtenido, concretamente un descenso del 10%.
Las nuevas líneas de negocio y las expectativas puestas en los próximos iPhone podrían representar el impulso definitivo. Los analistas creen que las nuevas actualizaciones de estos móviles y la necesidad de comprar nuevos modelos, motivará el mercado de consumidores al alza, en comparación a los ratios obtenidos durante 2018.
