En los últimos 20 años hemos vivido una revolución tecnológica que ha modificado de forma radical nuestros hábitos de compra-venta. A pesar de que muchos no logran superar sus reticencias, los consumidores demandan cada vez más sus productos a través de Internet atraídos por ofertas exclusivas y por la posibilidad de comparar, con relativa facilidad, los precios de los productos gracias a determinadas herramientas online. Por su parte, los minoristas se han lanzado a la conquista de Internet para beneficiarse de las muchas ventajas que ofrece el medio y de un mercado en expansión. Todo esto es bastante evidente en el sector textil, ya que tiene una implantación online considerable.
Según un estudio elaborado por la empresa de servicios financieros estadounidense Citi, las empresas que venden exclusivamente a través de internet cuadriplican en beneficios a las tiendas físicas. Los datos concretos que ofrece el estudio son los siguientes: las primeras, las compañías online, crecerán por encima del 20% durante este año y en similar proporción durante el siguiente, mientras que las físicas se quedarán en un modesto 5 ó 6%.
Según los datos de Citi será la compañía brítánica Boohoo, dedicada a la venta de ropa, la que va a experimentar un crecimiento más espectacular. A lo largo de 2016 crecerá un 26% con respecto al ejercicio anterior, y durante el año siguiente se prevé que lo haga en un 22%. Otra empresa del sector textil, como la británica ASOS, incrementará en un 21% sus beneficios anuales respecto a 2015 y se prevé que durante 2017 lo haga en un 22%. Para otro gigante del comercio electrónico como Zalando, se prevé un incremento algo menor, en torno al 17%.
Varios escalones por debajo parece que va a situarse Inditex, la mayor compañía del sector textil, que incrementará sus ventas en un 10% a lo largo de este año con respecto al anterior, lo que le sitúa a la cabeza en crecimiento de las tiendas físicas. H&M y Nike prevén crecimientos del 9%. Otras no crecerán o verán descender sus ventas respecto a sus resultados del año anterior. En el primer caso Hugo Boss y en el segundo, Ralph Lauren.
La situación está llamada a crecer en los próximos años si continúa la tendencia de progresiva implantación del comercio electrónico, cosa que es previsible. Y es que las empresas que se lanzan a vender a través de Internet no superan todavía un porcentaje del 11% de media.